lunes, 27 de septiembre de 2010
POR LA LEY DE MEDIOS
“Uno crece con la firmeza de que los espejos devuelven fielmente la imagen que se les pone delante, es una convicción muy fuerte. Hasta que por ahí alguien, alguna mano malvada, empieza a fabricar espejos que deforman, espejos que no devuelven la verdad sino la mentira, entonces uno que es morocho a la mañana se va a afeitar y ve una persona rubia, ve una persona distinta a lo que es uno. Pero uno tiene tanta confianza en los espejos que incluso prevalece esa confianza por encima de la realidad, y uno que se sabe morocho y ha vivido una morocha vida durante tantos años y que ha andado entre morochos, se ve rubio en el espejo y empieza a asumir rubias conductas, ¿por qué? Porque desde chicos nos han dicho que los espejos no mienten. Yo creo que a lo mejor ha llegado el tiempo de desconfiar del espejo, y pensar que quizás los fabricantes de espejos tengan intereses inconfesables que nosotros no conocemos, intereses entre los cuales figuran que nosotros nos creamos rubios siendo que somos morochos. Asi que a lo mejor más que preguntarle al espejo hay que preguntarle al de al lado, al que también es morocho, al que vive como nosotros, a ver cómo nos ve, a ver qué le pasa, a ver qué siente, a lo mejor hay que mirar más la realidad y menos el espejo de la realidad porque a veces ese espejo está tendenciosamente modificado y fraudulento.” Alejandro Dolina
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